El 21 de noviembre de 2018 se estrenó en México Roma, película dirigida, escrita, cofotografiada y coproducida por Alfonso Cuarón. Desde entonces, y sobre todo después de su estreno en Netflix, han aparecido diversas opiniones respecto al filme.
Daniel Krauze, coeditor del sitio de internet Letras Libres, opina que Roma “No se trata de un artefacto creado para chapotear en la cómoda nostalgia”, pues “Lo que comienza como una película que pacientemente observa y escucha los ritmos, los sonidos y las rutinas de aquel México, atrapa poco a poco al espectador en una de las experiencias más emotivas de los últimos años.”
El artículo nos da una breve introducción a la película: “Cleo (Yalitza Aparicio) trabaja en la casa de Sofía (Marina de Tavira), haciéndose cargo de sus cuatro hijos. […] Roma traza los paralelos entre ambas mujeres, cuyas vidas –solo por unos meses– atravesarán pugnas similares…” Sin embargo, la importancia del artículo de opinión de Daniel Krauze radica en la mención de los aspectos o detalles que tal vez a primera vista no resultan tan evidentes. Por ejemplo, el auto. Bien menciona Krauze que, fuera de contexto esto podría parecer simplemente la representación de los autos en esos años, pero haciendo un análisis a fondo, como lo hace él, el auto cobra más relevancia, dado que “es utilizado como recurso para establecer lo que Sofía siente por su marido: rabia, despecho y, finalmente, lejanía.” Así “Nada parece gratuito en Roma”.
Otro aspecto destacable del articulo es la comparación con Y tu mamá también, película del mismo director, aunque Krauze señala que tal vez el contraste puede parecer extraño, expone que “la cámara de Emmanuel Lubezki tiene una curiosidad similar: muchos de los pasajes más memorables empiezan o terminan lejos de la acción principal”, pues en Y tu mamá también "ve de refilón, aunque con agudeza, a la gente –a menudo humilde– que rodea a los chicos”. Sin embargo, en Roma la óptica cambia, ya que “A través del personaje de Cleo, Cuarón observa esas vidas, pero ya no de soslayo o en un parpadeo, sino colocándolas al centro de la historia; esto sin olvidar a la clase media, cuyas manías, rituales y formas de hablar conjura con precisión.”
“Cálida, sin buscar nuestra simpatía, conmovedora mas no cursi” son las palabras con las que Daniel Krauze describe la obra más reciente de Cuarón. Además destaca el importante que tiene la mujer en la película, “la mujer como figura solitaria, golpeada pero jamás vencida: así son Cleo, Sofía y hasta la abuela, quien viste de negro y apoya a la familia”.
Finalmente, Krauze cierra su artículo de opinión resaltando que Roma “es una película mexicana porque su ADN –su conflicto, el drama de su personaje central– es íntimamente nuestro”, pues la película “en función de México, es atemporal. Sucede en los setenta, pero también está ocurriendo allá afuera, en este instante.”
FUENTE: Krauze, Daniel. “Roma es una película de una sola pieza”. Letras Libres. 06-12-18
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Daniel Krauze, coeditor del sitio de internet Letras Libres, opina que Roma “No se trata de un artefacto creado para chapotear en la cómoda nostalgia”, pues “Lo que comienza como una película que pacientemente observa y escucha los ritmos, los sonidos y las rutinas de aquel México, atrapa poco a poco al espectador en una de las experiencias más emotivas de los últimos años.”
El artículo nos da una breve introducción a la película: “Cleo (Yalitza Aparicio) trabaja en la casa de Sofía (Marina de Tavira), haciéndose cargo de sus cuatro hijos. […] Roma traza los paralelos entre ambas mujeres, cuyas vidas –solo por unos meses– atravesarán pugnas similares…” Sin embargo, la importancia del artículo de opinión de Daniel Krauze radica en la mención de los aspectos o detalles que tal vez a primera vista no resultan tan evidentes. Por ejemplo, el auto. Bien menciona Krauze que, fuera de contexto esto podría parecer simplemente la representación de los autos en esos años, pero haciendo un análisis a fondo, como lo hace él, el auto cobra más relevancia, dado que “es utilizado como recurso para establecer lo que Sofía siente por su marido: rabia, despecho y, finalmente, lejanía.” Así “Nada parece gratuito en Roma”.
Otro aspecto destacable del articulo es la comparación con Y tu mamá también, película del mismo director, aunque Krauze señala que tal vez el contraste puede parecer extraño, expone que “la cámara de Emmanuel Lubezki tiene una curiosidad similar: muchos de los pasajes más memorables empiezan o terminan lejos de la acción principal”, pues en Y tu mamá también "ve de refilón, aunque con agudeza, a la gente –a menudo humilde– que rodea a los chicos”. Sin embargo, en Roma la óptica cambia, ya que “A través del personaje de Cleo, Cuarón observa esas vidas, pero ya no de soslayo o en un parpadeo, sino colocándolas al centro de la historia; esto sin olvidar a la clase media, cuyas manías, rituales y formas de hablar conjura con precisión.”
“Cálida, sin buscar nuestra simpatía, conmovedora mas no cursi” son las palabras con las que Daniel Krauze describe la obra más reciente de Cuarón. Además destaca el importante que tiene la mujer en la película, “la mujer como figura solitaria, golpeada pero jamás vencida: así son Cleo, Sofía y hasta la abuela, quien viste de negro y apoya a la familia”.
Finalmente, Krauze cierra su artículo de opinión resaltando que Roma “es una película mexicana porque su ADN –su conflicto, el drama de su personaje central– es íntimamente nuestro”, pues la película “en función de México, es atemporal. Sucede en los setenta, pero también está ocurriendo allá afuera, en este instante.”
FUENTE: Krauze, Daniel. “Roma es una película de una sola pieza”. Letras Libres. 06-12-18
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