Según información de Lauren Gurley Kaori, reportera e investigadora de The New Republic , n o hace mucho ambos políticos, tanto Donald Trump como Marco Rubio, se sabían como enemigos y declaraban en contra de cada uno llamándose de manera despectiva. Trump llamó al legislador “Liddle Marco” y además cuestionó su ciudadanía en febrero de 2016. Por su parte, Marco Rubio llamó a Donald Trump un “estafador”, tal y como lo muestra el artículo “ Rubio called Trump a dangerous ‘con man.’ Now he says Trump should be president ” publicado por The Washington Post . Sin embargo, la relación cambió después de que Trump tomara la presidencia y Rubio asumiera el cargo como ningún otro legislador, la visión de los Estados Unidos para América Latina. Hasta hace poco, la política exterior hacia esa región era incipiente o nula, con una visita a la Cumbre del G-20 por parte del presidente estadounidense en Argentina, y el vacío de 11 puestos diplomáticos de 28 en América Latina...