
Para responder lo anterior, la autora presenta cuatro
de sus ideas y recomendaciones:
1. “Los
partidos políticos (establecidos y emergentes) deben tratar de proponer
visiones inclusivas y programas que brinden beneficios a todos los ciudadanos,
no solo a una parte de los votantes”. En opinión de Cas Mudde, los partidos en
lugar de ofrecer beneficios para todos y legitimar la utopía populista “deben presentar
visiones y programas claros, pero también deben ser abiertos y honestos acerca
de los pros y los contras de varios grupos de la población”.
2. “Las
plataformas e iniciativas participativas y deliberativas (asambleas de
ciudadanos, jurados, foros) deben integrarse en los procesos de toma de
decisiones para equilibrar las tendencias oligárquicas de la democracia
electoral”. La autora expone que esto “es una medida temporal, para romper o
eludir a la élite fuera de contacto. Una vez que una elite adecuada, es decir,
una que es representativa de sus puntos de vista, ha sido (re) establecida, la
democracia directa ya no es necesaria”.
3. “Las
redes sociales deben ser reguladas y responsables de dañar un debate político
pluralista, basado en hechos y sin odio, de la misma manera que los medios
tradicionales”. Según la autora, los partidos populistas se han lanzado a las
redes sociales porque es el medio más democrático y libre, pues es el lugar
donde todas las personas se sienten libres de decir lo que piensan.
4. “Las
organizaciones de la sociedad civil que defienden los derechos humanos y la
igualdad contra el populismo deben acordar una agenda y una estrategia comunes
a través de las divisiones políticas”. Finalmente, la columnista Cas Mudde,
plantea que “No hay duda de que la división frente a una amenaza populista
organizada es problemática”, por eso es importante que “tanto los demócratas
liberales como los populistas reconozcan que la política es algo más que la
agenda populista”, pues “es la razón por la cual las organizaciones de la
sociedad civil deberían promover sus propias agendas y coordinarse entre sí
cuando tienen puntos en común, no por luchar contra el populismo, sino por
defender los derechos humanos y la igualdad”.
FUENTE: Mudde, Cas. “How can liberals defeat populism? Here are four ideas”. The Guardian. 02-13-18
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