Para competir en un mundo en el
que los avances tecnológicos y económicos de China amenazan con desplazar el
liderazgo estadounidense, el gobierno federal debe establecer y financiar por
completo una estrategia nacional de tecnología avanzada. Sin esa estrategia, es
muy probable que Estados Unidos continúe perdiendo participación de mercado en
una serie de industrias avanzadas, incluidas la aeroespacial, informática y
comunicaciones, servicios de Internet, ciencias biológicas, materiales, semiconductores
y vehículos, con implicaciones negativas para la innovación, seguridad nacional
y nivel de vida, señala el documento de David Adler, Next Steps for Ensuring
America’s Advanced Technology Preeminence, el cual te invitamos a consultar
en este boletín.
Comentarios
Publicar un comentario