La resolución del Republican National Committee como
respuesta a los polémicos eventos en Charlottesville, Virginia, fue de condena unánime a los supremacistas
blancos, los neonazis, y el Ku Klux Klan. A escasas dos semanas de una gran
debate nacional por las posturas ideológicas políticas ha llevado a que el
Partido Republicano se pronuncie casi en la misma línea de ambivalencia que la
Casa Blanca. Y es que si bien Donald Trump cambió sus declaraciones y eso generó
muchas críticas, también ahora, el Partido Republicano avala por unanimidad esa
condena, pero, en privado, en la misma reunión en la que se aprobó la
resolución, algunos funcionarios republicanos se burlaron de la idea de que el
partido sentía la necesidad de condenar oficialmente al KKK en 2017.
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