El tercer
juicio político en el senado a un presidente en la historia de Estados Unidos
concluyó el día 5 de febrero con votos que declararon al presidente no culpable
de abuso de poder y obstrucción del Congreso. El senador Romney y excandidato
republicano a la presidencia fue el único republicano en votar para condenar al
presidente en el primer artículo de impeachment, abuso de poder,
uniéndose a todos los demócratas del Senado en un voto de 52-48 de no culpable.
Romney votó con los republicanos en contra de la obstrucción del cargo del
Congreso, que cayó en línea recta del partido, 53-47 por la absolución. No hay
remordimiento ni conciencia en el partido republicano sobre las acusaciones y
las responsabilidades que a nivel constitucional parece haber adaptado a modo a
intereses individuales político electorales de Trump, haciendo ambigua la
interpretación de la constitución en un juicio político el cual se vino a
menos, pues no se llevó cabalmente, sin ni siquiera contar con testigos ni
testimonios principales que desenmascaran con precisión la consumación de
posibles delitos directamente imputables a Trump.
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